Coyunturas y mentalidades

Días atrás se ha presentado (mitin incluido) el libro «Guillermo Rionda y el urbanismo en Gijón (1931-1937)». Aparejador, Rionda fue uno de los miembros directivos del Ayuntamiento de Xixón entre agosto de 1936 y la caída de la ciudad, en octubre de 1937. Socialista, fue fusilado en 1938. Junto con otros arquitectos y con el conjunto de la Corporación, Rionda impulsó un plan de reformas que pretendían, fundamentalmente, demoler obstáculos («martillos», diríamos para entendernos) y planificar grandes vías de comunicación para la ciudad. Algunas de esas propuestas ya venían de atrás, otras eran verdaderamente innovadoras. La brevedad del mandato de la Corporación municipal no permitió concluir algunos planes ni empezar otros.