La culpa fue del cha-cha-cha*

A las cinco de la tarde. Eran las cinco en punto de la tarde y allí estaban los convocados y ¡oh sorpresa! Un invitado no anunciado, Valentín Fernández Díez, a quien le hicieron un pequeño homenaje. El motivo de tal reconocimiento fue el de ser el primer alcalde tras la Constitución de 1978. Pertenecía a un grupo independiente que más adelante tomaría el nombre de Unidad Campesina de Tineo, que nada tenía que ver con el sindicato asturiano. Valentín salió por la puerta de atrás de ese grupo y años más tarde en las filas del PSOE, como número uno, se sumaría a una moción de censura del PP. Le acompañó, también concejal socialista, José Ramón García Alba, «Pachón», hoy secretario de Unidad Campesina de Asturias. Les siguió en la traición política Inmaculada Alonso Marcos.